¡Adóptame!

¿Qué tal? Soy un perro que, bueno, por lo pronto no tengo nombre. Hace apenas dos días me encontraba vagando por las calles de Monterrey, en donde fui maltratado y atropellado. Una señora vió que tenía una pata rota y me recogió y me llevó al veterinario para que me curaran. Hoy, espero encontrar un lugar dónde vivir, en donde me quieran y cuiden de mí.

Hey qué onda todos? Pues bien, he aquí una foto del pequeñito al que estoy cuidando en estos días. Mi hermana (Melissa para aquellos que no sepan), se puso en contacto hace días con Prodan, una organización en donde recogen a perros de la calle y les buscan casa para ofrecerse como voluntaria. Como no había dónde poner a este perrito, nos lo dieron a cuidar unos días, en lo que se mejora y le pueden encontrar un hogar. Ahorita le estoy dando medicina, pero es sólo para el dolor. En sí, ya está bien, ya puede caminar y todo.

Es un perrito mestizo (qué fancy suena no? jaja), pero la verdad está bien bonito... jajaja, las fotos no le hacen justicia. El pelo lo tiene suavecito, y es súper cariñoso. Nosotros preferimos tenerlo aquí en la casa que en la perrera, no sólo porque eso le alarga su esperanza de vida, sino porque pues, a fin de cuentas, ya era justo para el pobre perro que alguien le mostrara un poco de cariño y cuidados.

Desgraciadamente, tampoco podemos tenerlo permanentemente aquí, porque como sabrán, tengo otro perro, y pues, dos perros en un departamento chico como el mío está caótico. Así que si tienen un espacio en su casa, y sobretodo, en su corazón, les invito a conocerlo.

Si por algo no pueden o quieren, les invito a participar con esta organización, tienen muchas formas en que pueden ayudar, y la verdad, es muy gratificante poner un pequeño granito de arena.

Saludos a todos.

Meg.