10 de noviembre de 2005

Me llamo Megumi, y soy... estudiante

Hoy, 10 de noviembre, me cayó por fin el veinte: ¡ya estoy del otro lado!
Para los que no me conocen y no se han tomado la molestia de voltear a su derecha a ver mi perfil, soy estudiante... y, es extraño, pero, con las constantes pláticas en mis clases, me doy cuenta que, en efecto, me defino a mí misma como tal siempre que me presento, y raro... me defino en base a un estatus temporal de la vida.
Ahora que dejaré de ser estudiante, la típica de pregunta "¿Qué vas a hacer?", la transformaba en mi cabeza como "¿Qué vas a ser?" y cómodamente respondía "Licenciada" (dejé de responder "desempleada" porque eso sonaba muy pesimista, y pues, porque no me voy a graduar en las filas del desempleo). Curioso el papel que desempeña la escuela en nuestras vidas: Te definen mientras estás en ella, y también cuando sales de ella.
Retomando una analogía que vimos en la clase, estoy como el mundo ante el nuevo escenario que planteó el fin de la Guerra Fría: lo que aparentemente daría calma y estabilidad, es sólo el inicio de la incertidumbre. Sería mucho más cómodo no graduarme y seguir estudiando, cosa que aparentemente se me da bien, pero no, esa opción no está disponible. Ya ni siquiera me importan mis clases de este semestre, sólo tengo que aprobarlas para cumplir con el protocolo, y lo que hago ahorita lo hago más por gusto que por obligación.
Por eso voy a tomarme las cosas con calma... la incertidumbre no es sino una actitud. Prefiero pensar que hay muchas puertas tras un telón: no sé cuántas, ni en cuáles pueda tocar... pero estoy segura que las hay.
Y cuando una se abra, me dirán "Bienvenida, licenciada Terui".

2 comentarios:

Ana Molkas dijo...

ni hao!

FELICIDADES POR LA ACTITUD MEG!!!

te leeré... good idea to have a blog.


Ana

Ana Molkas dijo...

Deberías de hablar con Natxo. Él te dirá el rol que viene a jugar tu siguiente paso en tu definición: la profesión. Pues, según nos cuenta este nuevo estatus no marca únicamente tu vida en términos discursivos sino en la forma en que la llevas... quizá ahora menos determinante que antes (justamente por este desvanecimiento sabaca el tema él) pero creo que aún existe... el punto es si te gusta o no, y si lo quieres así o no.